La administración de Javier Milei confirmó los nuevos valores del salario mínimo que regirán desde agosto de 2026 y oficializó también los montos actualizados de las prestaciones por desempleo. Las medidas buscan establecer una referencia salarial en el marco del esquema de reformas económicas impulsado por el Ejecutivo.

El Gobierno nacional definió el salario mínimo, vital y móvil que estará vigente a partir de agosto de 2026, una actualización clave para trabajadores registrados, informales y beneficiarios de programas sociales que utilizan este índice como referencia. Con la resolución publicada, se establece el nuevo piso salarial en un contexto de reordenamiento macroeconómico y de negociaciones paritarias que avanzan en paralelo.

Además del salario mínimo, el Ejecutivo confirmó los valores de las prestaciones por desempleo, que también tendrán un incremento acorde al ajuste general. Este beneficio, que alcanza a trabajadores que perdieron su empleo formal, tendrá un nuevo rango de pagos para adecuarse a la evolución de ingresos y gastos durante el próximo año.

El Gobierno sostiene que estas definiciones forman parte de una política de “ordenamiento” que busca dar previsibilidad al mercado laboral, aunque los gremios señalan que los aumentos siguen por debajo de la inflación y reclaman mayor actualización. Empresarios y cámaras sectoriales, por su parte, observan con cautela el impacto del nuevo piso salarial sobre los costos laborales, especialmente en pequeñas y medianas empresas.

Con este anuncio, el Ejecutivo cierra uno de los puntos sensibles de la agenda económica de cara al 2026, mientras se prepara para nuevas discusiones sobre reformas laborales y acuerdos paritarios que marcarán el ritmo del año próximo.